Nueve de cada diez personas de todo el mundo respiran aire contaminado
El cáncer de mama es el cáncer más común en mujeres (aparte de los cánceres de piel). Cada año aproximadamente 240.000 mujeres son diagnosticadas con cáncer de mama en los Estados Unidos. 1 de cada 8 mujeres desarrolla cáncer de mama en su vida. Aproximadamente 40.000 mujeres mueren de esta enfermedad, siendo la segunda causa principal de muerte por cáncer.
7 millones de muertes cada año
La OMS estima que alrededor de 7 millones de personas mueren cada año por la exposición a partículas finas en el aire que penetra profundamente en los pulmones y el sistema cardiovascular, causando enfermedades como accidentes cerebro-vasculares, enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón, enfermedades pulmonares obstructivas crónicas e infecciones respiratorias, incluida la neumonía. La contaminación del aire por sí sola causó alrededor de 4,2 millones de muertes en 2016, mientras que la contaminación del aire en las viviendas por cocinar con combustibles y tecnologías contaminantes ocasionó un estimado de 3,8 millones de muertes en el mismo período.
La OMS reconoce que la contaminación del aire es un importante factor de riesgo para las enfermedades no transmisibles y causa un cuarto (24%) de todas las muertes de adultos por enfermedad cardíaca, 25% por infarto, 43% por enfermedad pulmonar obstructiva crónica y 29% por cáncer de pulmón.
Más países tomando acciones
Más de 4300 ciudades en 108 países están ahora incluidas en la base de datos de calidad del aire externo de la OMS. Desde 2016, se han agregado más de 1000 ciudades adicionales a la base de datos de la OMS, lo que demuestra que más países están midiendo y tomando acciones para reducir la contaminación del aire.
Las recomendaciones de la OMS sobre la calidad del aire requieren que los países reduzcan su contaminación del aire a valores medios anuales de 20 ?g/m3 (para PM10) y 10 ?g/m3 (para PM2,5).
“Muchas de las mega ciudades del mundo exceden en más de 5 veces los niveles de referencia de calidad del aire de la OMS, representando un riesgo importante para la salud de las personas”, dice Maria Neira, Directora del Departamento de Salud Pública, Determinantes Sociales y Ambientales de la Salud.
Si bien los últimos datos muestran que los niveles de contaminación del aire externo todavía son peligrosamente altos en la mayor parte del mundo, también muestran algunos avances positivos. Los países están tomando acciones para abordar y reducir la contaminación del aire por partículas. Por ejemplo, el Plan Pradhan Mantri Ujjwala Yojana de la India ha proporcionado conexiones gratuitas de GLP a 37 millones de mujeres que viven por debajo de la línea de la pobreza para apoyarlas a usar energía limpia en sus casas. Ciudad de México se ha comprometido con estándares más estrictos para vehículos, incluido el cambio a autobuses sin hollín y la prohibición de autos privados a diésel para el año 2025.
La contaminación del aire no reconoce fronteras. Mejorar la calidad del aire exige acciones gubernamentales sostenidas y coordinadas en todos los niveles. Los países deben trabajar juntos en soluciones para el transporte sostenible, la producción y el uso de energía más eficiente y renovable, y la gestión de residuos.
Conclusiones:
• La OMS estima que alrededor del 90% de las personas en todo el mundo respira aire contaminado. En los últimos 6 años, los niveles de contaminación del aire externo se han mantenido altos y aproximadamente estables, con concentraciones decrecientes en algunas partes de Europa y América.
• Los niveles más altos de contaminación del aire externo se encuentran en la región del Mediterráneo Oriental y en el sudeste asiático, con niveles medios anuales exceden 5 veces las recomendaciones de la OMS, seguidos por ciudades de África y el Pacífico Occidental.
• Europa tiene el mayor número de lugares que reportan datos.
• En general, los niveles de contaminación del aire externo son más bajos en los países de altos ingresos, particularmente en Europa, América y el Pacífico Occidental. En las ciudades de los países de ingresos altos en Europa, se ha demostrado que la contaminación del aire reduce la expectativa de vida promedio entre 2 y 24 meses, dependiendo de los niveles de contaminación.
“Los líderes políticos de todos los niveles del gobierno, incluidos los alcaldes de las ciudades, están comenzando a prestar atención y a tomar medidas”, agregó el Dr. Tedros. “La buena noticia es que estamos viendo más gobiernos comprometidos en monitorear y reducir la contaminación del aire, así como una mayor acción global del sector de la salud y otros sectores como el transporte, la vivienda y la energía”.
Este año, la OMS convocará la primera Conferencia Mundial sobre Contaminación del Aire y Salud (30 de octubre – 1 de noviembre de 2018) para reunir a gobiernos y socios en un esfuerzo global por mejorar la calidad del aire y combatir el cambio climático. http://www.who.int/airpollution/events/conference/en/
Contactos:
Departamento de Salud Pública
Determinantes Sociales y Ambientales de la Salud, OMS
Nada Osseiran: osseirann@who.int
Departamento de Comunicación, OMS
Christian Lindmeier: lindmeierch@who.int