El expresidente y actual candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump (2017-2021), prometió este lunes fomentar la producción de energía nuclear si gana las elecciones y apostar por el “Made in USA” en la cadena de suministro para encauzar la economía del país.
Trump se pronunció así en un mítin en una fábrica de componentes industriales en York (Pensilvania) que su campaña había descrito como un discurso sobre su agenda económica y que, si bien incluyó algunas propuestas, fue generalmente vago y se centró más en el ataque a su rival demócrata, Kamala Harris.
Kamala Harris aventaja ligeramente a Donald Trump
El candidato comenzó el discurso de casi una hora insistiendo en algunos de sus lemas: crear “millones” de trabajos, bajar los impuestos, retirar regulaciones, reconstruir la base industrial estadounidense y frenar la externalización a otros países, y “recuperar estas bellas palabras: ‘Made in USA'”.
Como ya hizo la semana pasada, Trump prometió recortar el precio de la energía a la mitad en sus primeros doce meses de mandato, incluyendo los de “la calefacción, el aire acondicionado, la electricidad y la gasolina” de las fábricas, en las que confía para hacer “EE.UU. asequible otra vez”.
“Hoy anuncio que cuando vuelva a la Casa Blanca, acabaré con la cruzada antiestadounidense de la energía y con la llamada norma de las Centrales Eléctricas de Kamala”, dijo, acusándola de una “yihad regulatoria” para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en las plantas impulsadas por combustibles fósiles.
En ese sentido, prometió “construir decenas y decenas” de centrales eléctricas”; “aprobar rápidamente nuevas infraestructuras de energía”, incluyendo la nuclear, que elogió como “una gran energía”.
También prometió un “compromiso histórico” para poner en funcionamiento “pequeños reactores modulares” en lugar de “plantas nucleares masivas”, poniendo como ejemplo a Francia.
“Miles de millones de dólares del contribuyente se están enviando para subvencionar fábricas de paneles solares, molinos eólicos, producción de baterías y automóviles, todos en China (…). Bajo la Administración Trump, construiremos estadounidense, compraremos estadounidense y contrataremos estadounidense”, sentenció.
Asimismo, aseguró que “tendremos cadenas de suministro domésticas 100 % estadounidenses en todos los bienes esenciales” y aseguró que llevará de vuelta a EE.UU. “la producción de (dispositivos) electrónicos” y de vehículos, destruida “por los autos eléctricos” que se externalizan a otros países.
“Cuando asuma el cargo, invocaré la Ley de Producción para Defensa cuando sea necesario para elevar rápidamente la capacidad de los productos esenciales, e impediré que Japón compre United States Steel”, agregó, en referencia a la compra del gigante estadounidense anunciada en 2023, que aún no se ha cerrado.
Aparte de eso, Trump personificó en Harris, a la que calificó de comunista recurrentemente, sus ataques a la Administración de Joe Biden por el aumento de precios de los bienes comunes, la pérdida de competitividad frente a China u otros países, y las diferentes ramificaciones de esos dos factores.
También abordó la reciente publicación del reporte de sus finanzas por obligaciones electorales, que cifra los ingresos de sus negocios desde el año pasado y sus obligaciones, sobre lo que señaló “no necesito dinero” y aseguró que siendo presidente perdió “miles de millones de dólares” pero quedó “satisfecho”.
Fuente e Imágen Crédito: EFE