Venezuela, Brasil, Chile y Cuba se han sumado al grupo de países latinoamericanos que han expresado su preocupación por una eventual escalada de la violencia en Oriente Medio después de que Irán materializara un ataque directo a Israel con el lanzamiento de drones y misiles en represalia por el reciente bombardeo a su consulado en Damasco, en el que murieron trece personas.
El Gobierno de Venezuela expresó que «sigue los preocupantes acontecimientos» en el Oriente Medio, donde -declaró- «la inestabilidad ha empeorado dramáticamente» como consecuencia de la «irracionalidad» del Estado israelí y el «genocidio en Palestina».
En tanto, Brasil pidió en un comunicado de su Ministerio de Exteriores la «máxima contención» a ambas partes tras el ataque iraní a Israel de ayer y exhortó a la comunidad internacional a movilizar esfuerzos para evitar una escalada.
Igualmente, señaló que desde el inicio del actual conflicto en la Franja de Gaza, Brasil ha alertado del potencial destructivo que puede causar la extensión de las hostilidades a Cisjordania y a otros países como Líbano, Siria, Yemen y ahora Irán.
La postura de estos dos países, que no utilizaron palabras de condena explícita del que representa el primer ataque directo que lleva a cabo la República Islámica de Irán contra territorio israelí, contrastan con el «férreo» compromiso de Washington a su socio, y están en línea con el emplazamiento hecho ayer por el presidente colombiano, Gustavo Petro, «al pueblo de Israel» para «detener la locura de su gobernante».
Por su parte, el presidente chileno, Gabriel Boric, condenó el ataque de Irán y reiteró la apuesta de su Gobierno por la paz y el respeto a los derechos humanos.
En tanto, Cuba apuntó a la «incapacidad» del Consejo de Seguridad de la ONU tras el ataque al consulado de Irán en Siria -que el Gobierno iraní atribuyó a Israel- como el «catalizador» de la respuesta contra los israelíes, y pidió una “desescalada” del conflicto.
Aunque la respuesta de los países latinoamericanos que se ha pronunciado sobre la crisis fluctúa de la «condena rotunda» de la ofensiva iraní hasta la atribución de responsabilidad a Israel por lo sucedido en el consulado iraní en Damasco, donde murieron siete militares y seis civiles, el denominador común es el emplazamiento a la comunidad internacional a tomar medidas decisivas para evitar un derramamiento de sangre y prevenir futuras agresiones.
Uno de los primeros países en fijar su postura fue México, que ayer condenó la acción y llamó a las partes a buscar soluciones de manera pacífica para evitar la generalización del conflicto en Medio Oriente.
Por medio de un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores expresó su preocupación por el uso de la fuerza en las relaciones internacionales y señaló que el conflicto podría costar miles de vidas.
Argentina en tanto, expresó su «solidaridad y compromiso inclaudicable» con Israel en un comunicado difundido en redes sociales.
El presidente Javier Milei suspendió ayer la gira internacional que estaba realizando y regresó a Buenos Aires para celebrar este domingo «un comité de crisis», al tiempo que su oficina publicaba un comunicado en el que «respalda enfáticamente» a Israel «en la defensa de su soberanía» contra «regímenes que promocionan el terror y buscan la destrucción de la civilización occidental».
El Gobierno de Uruguay también condenó el uso de la fuerza por parte de Irán y lamentó el agravamiento del conflicto en Medio Oriente.
«Ante la peligrosa escalada regional del conflicto en Medio Oriente y el reciente ataque contra Israel, Uruguay lamenta el agravamiento del conflicto, así como las consecuencias que pudiera implicar para la trágica situación humanitaria y de víctimas civiles de la región», subrayó la Cancillería en un comunicado.
En esta misma línea, las autoridades de Paraguay expresaron el apoyo a Israel y su preocupación por aumento de violencia en la región
El presidente Santiago Peña manifestó su «pleno respaldo» a Israel y dijo que ve con preocupación la escalada de la violencia en Oriente Medio, al tiempo que informó de que el Gobierno está en contacto con las embajadas paraguayas en la zona para atender a sus compatriotas.
Desde Bogotá, el presidente colombiano, Gustavo Petro, pidió a la ONU «reunirse de urgencia», como finalmente hizo este domingo, y apostar por la paz entre Irán e Israel
Mientras tanto, la Cancillería de Ecuador dijo el sábado que se mantiene en permanente comunicación con su personal diplomático en Israel y Palestina, mientras que el Gobierno de Perú recomendó a sus connacionales evitar desplazamientos a la región.
Fuente: EFE
Imagen crédito: cortesía El Tiempo