Algunas áreas generales incluyen:
Leyes de zonificación: Si su negocio no cumple con ellas, podrá ser multado o clausurado.
Restricciones de Productos: Ciertos productos no pueden ser producidos en casa. La mayoría de los estados prohíbe la producción casera de fuegos artificiales, drogas, venenos, explosivos, productos sanitarios o médicos y juguetes. Algunos estados prohíben los negocios en el hogar para la elaboración de comida, bebida o ropa.
Asegúrese de consultar con un abogado y con los Departamentos de Estado, de Trabajo y de Salud estatales y municipales para conocer las leyes y reglamentos que regirán su negocio. Verifique además los requisitos de registro y de contabilidad necesarios para abrir su propio negocio en el hogar.
Tal vez tenga que obtener un certificado de trabajo o licencia estatal; también tendrá que registrar el nombre de la empresa con el estado.
Una buena práctica es tener una línea telefónica comercial y una cuenta bancaria separadas.
Si tiene empleados bajo su responsabilidad, recuerde también aplicar las retenciones del impuesto a la renta y los impuestos de seguro social y cumplir con las leyes del salario mínimo y las normas de seguridad y salud del empleado.