El Servicio Secreto estadounidense comenzó a emplear perros robot para la protección del presidente electo, Donald Trump, en su residencia y club privado de Mar-a-Lago, en Palm Beach (Florida).
Imágenes de uno de estos caninos mecánicos, ‘Spot’, patrullando por las inmediaciones de Mar-a-Lago se volvieron virales gracias a los videos que subieron varios visitantes del club.
‘Spot’, que luce colores negro, blanco y rojo, está fabricado por la empresa Boston Dynamics, con sede en Masachusetts, y tiene todo el aspecto de un perro mecánico, con la peculiaridad de que en sus patas se lee impresa la frase «No acariciar».
El cuerpo del robot lleva el nombre ‘USSS TSD’, la División de Seguridad Técnica del Servicio Secreto.
Según esta agencia federal, el perro robot proporciona «experiencia técnica y apoyo operativo para investigaciones criminales», al tiempo que trabaja para crear entornos seguros para las personas bajo la protección del Servicio Secreto.
«La protección del presidente electo es una prioridad máxima», dijo el portavoz del Servicio Secreto, Bob Page, en un correo electrónico al Daily News, para añadir que estos perros robóticos de la agencia están equipados con tecnología de vigilancia y una serie de sensores avanzados para operaciones de protección.
En julio pasado, el Servicio Secreto subió a las redes sociales un video en el que describe la operatividad del robot de Boston Dynamics, y apuntó que forma parte del programa ASTRO (Sistemas Autónomos y Operación Robótica Técnica) de la agencia federal.
‘Spot’ es el primer robot de Boston Dynamics comercializado y cuesta alrededor de 75.000 dólares, un precio que puede aumentar en función de las características adicionales.
Mide algo menos de 1,20 metros de largo y unos 60 centímetros de altura y puede moverse a velocidades de hasta 1,50 metros por segundo sobre sus cuatro patas.
Desde su lanzamiento, agencias gubernamentales, organizaciones de aplicación de la ley y empresas han incorporado a ‘Spot’ a sus equipos, entre otras Florida Power & Light y Chevron.
Fuente e Imágen Crédito: EFE