El gobernador de Texas, Greg Abbott, fue acusado de “fomentar el odio antiinmigración y antilatinos” por parte de la alcaldía de Nueva York, enfrascada en una agria polémica con el gobierno texano por los envíos de miles de inmigrantes en autobuses hacia Nueva York.
El comisionado de Inmigración de la alcaldía neoyorquina, el mexicanoestadounidense Manuel Castro, dijo en declaraciones a la CNN que el envío de inmigrantes de Texas a Nueva York sin coordinación alguna está causando “una crisis extremista de extrema derecha”. Además, refirió que los inmigrantes enviados desde Texas son casi todos solicitantes de asilo y gozan de libertad de movimientos mientras dura su proceso migratorio (que puede tardar años), por lo que es falso tratarlos de indocumentados o de ilegales. (EFE)