Una enorme tormenta invernal azotaba el centro de Estados Unidos el lunes 12 de diciembre, y amenazaba a millones de personas con fuertes nevadas, lluvia helada e inundaciones.
El Servicio Nacional de Meteorología advirtió que podría haber “varios peligros meteorológicos generalizados y de grandes repercusiones en el corazón del país esta semana”.
Los habitantes desde Idaho hasta Wisconsin, y hasta de zonas más al sur como Luisiana, recibieron advertencias de que deben estar preparados para condiciones de nevasca en el norte e inundaciones repentinas en el sur.
Para este martes 13 de diciembre, Texas y el norte de Luisiana podrían verse afectados por fuertes granizadas, vientos y tornados. La tormenta continuará por el sureste del país hacia la Florida en los próximos días, de acuerdo con los meteorólogos.
“Será una semana agitada mientras este sistema se mueve por el país”, comentó Marc Chenard, meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología en la oficina de College Park, Maryland.
Funcionarios de la zona occidental de Dakota del Sur pidieron a los residentes prepararse para recibir 15 centímetros o más de nieve. “Tengan sus palas a la mano, compren sus alimentos y revisen que tengan otros suministros necesarios. Las carreteras serán difíciles de transitar”, advirtieron. (La Voz de América)