Los hospitales infantiles de algunas partes de Estados Unidos están registrando un repunte de una enfermedad respiratoria común que puede provocar problemas graves en los bebés.
Los casos del virus respiratorio sincitial (VRS) cayeron drásticamente hace dos años en momentos en que la pandemia obligaba al cierre de escuelas, guarderías y negocios. Con el retiro de la mayoría de las restricciones a mediados de 2021, los doctores registraron un alarmante aumento de lo que suele ser un virus de las temporadas de otoño e invierno.
Ahora está de regreso. Y los doctores se preparan para ver cómo el VRS, la influenza y el COVID-19 podrían combinarse para aumentar la presión en los hospitales.
“Lo califico como una emergencia”, dijo el doctor Juan Salazar, del Hospital Infantil de Connecticut, donde el VRS ha provocado que salas de juego y otros espacios en los que no solía haber camas sean adaptados para recibir pacientes. La institución contempló usar un hospital de campaña de la Guardia Nacional, pero dejó de lado esa opción por el momento. (El Nuevo Día)