La evolución social que se presenta desde los grupos nómadas hasta las sociedades contemporáneas, se nutren de símbolos que forjan el origen de cada una de las personas. Por lo tanto, no es ajeno que “la identidad común” sea uno de los tres componentes fundamentales de una nación o un país (Estado-Nación).
Como especie con necesidades de pertenencia, es fundamental que el individuo adquiera conciencia sobre quién es y de dónde viene para que sea capaz de identificarse con valores específicos que le permitan interrelacionarse con otros. Las particularidades que se derivan de un grupo determinado de personas son, precisamente, las que otorgan identidad y permiten la integración a una sociedad.
Las tradiciones son, quizás, el mayor reflejo de la identidad. En el caso de México, su riqueza histórica y cultural le otorga características únicas que son motivo de reconocimiento y referencia internacional.
Una de las costumbres más significativas para iniciar el año nuevo es el 6 de enero, fecha en que los mexicanos alrededor del mundo se reúnen en familia para celebrar el Día de Reyes. El misticismo de nuestras tradiciones nos lleva a recordar la “epifanía”, término con el que se conoce al día en el que los tres Reyes Magos conocieron al niño Jesús. Este encuentro se simboliza con la tradicional Rosca de Reyes.
A la Rosca de Reyes se le asignan diversos símbolos. Por ejemplo, el niño Dios que se coloca en su interior representa el momento en el que José y María escondieron a su hijo del Rey Heródes. Asimismo, el ate, según diversas interpretaciones, recrea las joyas de los reyes que significan paz, amor y felicidad.
En nuestro país es tradición que quien obtenga el “niño Dios” al momento de partir la rosca, ofrezca tamales el 2 de febrero. Por nuestro origen mesoamericano y europeo, el Día de la Candelaria en México simboliza la presentación de Jesús en el Templo de Jerusalén y, de acuerdo a Fray Bernardino de Sahagún, el inicio del año nuevo mexica; en el que se servían tamales como parte de las celebraciones, según diversos investigadores. La identidad transciende fronteras. En cualquier parte del mundo, los mexicanos deben sentirse orgullosos de su origen y transmitir con alegría sus tradiciones. Gracias a nuestra comunidad, México se siente en cualquier rincón.
Alan Torres Tovar
Cónsul de Protección en la Sección Consular de la Embajada de México en Estados Unidos.
