Los obispos católicos de la nación tuvieron su reunión anual desde el 12 hasta el 14 de noviembre en el Baltimore Marriott Waterfront, en el contexto de una crisis de abuso sexual que ha alcanzado los niveles más altos de la iglesia en los EE.UU. Después de un año del informe del gran jurado de Pensilvania que reveló que cientos de “sacerdotes depredadores” abusaron de más de 1,000 niños durante siete décadas y un cardenal estadounidense renunció por acusaciones de abuso sexual, la Conferencia de Obispos Católicos de los EE. UU., tuvo en su agenda, por primera vez, la formulación de políticas para enfrentar este escándalo.
Obispos de EE.UU dijeron que la respuesta a la crisis de abuso es ‘incompleta’
Luego que el vaticano solicitó el aplazamiento de una votación sobre las nuevas medidas de responsabilidad del obispo, la reunión comenzó con una evaluación crítica del estado actual de trasparencia y reforma. El Dr. Francesco Cesareo, dijo a los obispos que “su respuesta a esta crisis ha sido incompleta y mencionó la falta de transparencia de los casos pasados de abuso y la falta de responsabilidad de los obispos. “Hoy, los fieles y el clero no confían en muchos de ustedes. “Están enojados y frustrados, ya no están satisfechos con las palabras e incluso con la oración”, continuó. La Junta Nacional de Revisión aprobó una investigación completa sobre el ex cardenal Theodore McCarrick y su ascenso al poder dentro de la Iglesia a pesar de décadas de abusos en serie a los seminaristas y, al menos en un caso, a un menor. También anunció su apoyo a un mecanismo de información de terceros para reclamos contra obispos y un nuevo código de conducta para obispos, propuestas apoyadas por voto de consenso verbal. Foto cortesía
23 de noviembre de 2024
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Crisis de abuso sexual en niveles altos de la iglesia católica de los EE.UU. dominó la agenda en la reunión de obispos en Baltimore
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