Con el presidente Donald Trump, la Oficina de Aduanas e Inmigración (ICE), podrá detener a todos los solicitantes de asilo que llegan a la frontera y permanecerán encarcelados hasta que los jueces de inmigración decidan su futuro en las cortes, amenazando con llenar las cárceles de niños y adultos. Anteriormente tras pedir asilo, las autoridades permitían la entrada a un programa discrecional alternativo que accedía a los solicitantes esperar en libertad hasta la decisión de un juez. Ahora con este cambio de reglas ICE pone fin a toda discrecionalidad a partir del 20 de junio, finalizando con el programa que benefició a más del 90% de los inmigrantes arrestados en la frontera desde 2014. El mandatario, pidió la contratación de nuevos agentes y jueces de asilo, enviar a los indocumentados a centros de detención, acelerar las deportaciones y cerrar las oportunidades de contratación de abogados para la defensa de estos casos.
16 de noviembre de 2024
Menú