La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune que afecta principalmente las articulaciones de las manos, codos, pies y rodillas. La causa de la enfermedad aún se desconoce pero se sabe, que un defecto en el sistema inmune es responsable del daño que se presenta en las articulaciones. En condiciones normales, el sistema inmune se encarga de protegernos de agentes infecciosos como bacterias y virus. Esto lo logra produciendo potentes proteínas, como los anticuerpos, que se encargan de neutralizar y destruir todo aquello que nuestro cuerpo considere peligroso para la salud. Por motivos que aún se desconocen, el sistema inmune de pacientes con artritis reumatoide se equivoca, y ataca a las articulaciones como si fueran agentes extraños a nuestro cuerpo. Esto produce inflamación y daño destructivo en las articulaciones.
¿Cuáles son los síntomas de la artritis reumatoide?
La enfermedad se presenta entre los 30 y 60 años de vida y afecta a mujeres tres veces más frecuentemente que a los hombres. Los niños también pueden desarrollar una enfermedad similar a la artritis reumatoide, pero se le conoce con otro nombre (artritis idiopática juvenil), para distinguirla de la enfermedad en adultos. La artritis reumatoide se manifiesta inicialmente con dolor e inflamación en más de una articulación, principalmente en las manos, las muñecas, codos, tobillos y pies. Conforme la enfermedad avanza, las rodillas, los hombros, las caderas y el cuello también se pueden ver afectados. Una característica muy importante de la enfermedad es que se presenta de forma simétrica, esto es, que las mismas articulaciones de ambos lados del cuerpo (derecho e izquierdo) son afectadas al mismo tiempo. Es importante recalcar que existen muchas enfermedades a las que se le llama “artritis”. Sin embargo, cada una tiene una causa y un tratamiento muy diferente. Es por esto que el diagnóstico preciso es muy importante, ya que permite el tratamiento temprano de pacientes con artritis reumatoide y evita usar tratamientos inapropiados en pacientes que no tienen esta enfermedad.
¿Cuáles son las complicaciones de la artritis reumatoide?
La destrucción, deformidad e invalidez funcional de las articulaciones, lo cual lleva a discapacidad física, son complicaciones que se presenta a través de varios años de tener la enfermedad. Esto se observa principalmente en pacientes que no recibieron tratamiento adecuado o en formas muy graves de la enfermedad que no responden completamente a tratamiento. Los pacientes con artritis reumatoide tienen además un mayor riesgo de tener enfermedades cardiovasculares (esto es del corazón y los vasos sanguíneos) como la arterioesclerosis, cuya complicación más grave es el infarto al corazón. Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en los pacientes que sufren de artritis reumatoide. La enfermedad también puede afectar a otros órganos además de las articulaciones, incluyendo los pulmones, las glándulas que producen saliva, y los ojos, entre otros órganos. Aún cuando la afección de estos órganos es infrecuente en pacientes con artritis reumatoide, las complicaciones pueden ser graves y requieren tratamientos especiales.
¿Cómo se diagnostica la artritis reumatoide?
El diagnóstico es clínico y debe ser realizado por un médico con experiencia, de preferencia por un reumatólogo. La enfermedad primero se sospecha de acuerdo a las características de presentación de la artritis y el diagnóstico se apoya a través de estudios especiales de laboratorio y radiografías de manos y pies. En algunos casos el diagnóstico puede ser difícil en la fase inicial de la enfermedad o puede ser confundido con otras formas de artritis. No hay un estudio que sea 100% específico de artritis reumatoide, por lo que el diagnóstico se basa en el conjunto de síntomas, la exploración del médico y los estudios de laboratorio.
¿Qué debo hacer si creo que tengo artritis reumatoide?
Acudir con su médico para evaluación y ser referido con un reumatólogo si se confirma la sospecha de tener artritis reumatoide
¿Cuál es el tratamiento de la artritis reumatoide?
Debido a que se desconoce la causa de la enfermedad, no existe una cura para tratar la artritis reumatoide. La enfermedad es crónica y el paciente debe ser evaluado por su médico continuamente. El objetivo del tratamiento es suprimir los síntomas (dolor e inflamación), mejorar la capacidad funcional y frenar la progresión del daño en las articulaciones. Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos que suprimen al sistema inmune, terapia física y en casos avanzados se puede requerir cirugía para corregir articulaciones muy dañadas. Los medicamentos tienen diferente potencia para controlar la inflamación, por lo que la selección del tratamiento depende de la gravedad de la enfermedad en cada paciente.