Desde hace varias semanas, las vacunas de refuerzo bivalentes contra el Covid-19 han estado disponibles en todo Estados Unidos, reformuladas para proteger contra el virus original y las nuevas variantes de ómicron que han enfermado a millones recientemente.
Sin embargo, los reportes iniciales sugieren que la población no está apurada para vacunarse, y aunque los funcionarios de salud perciben esto como un reto, algunos dicen que la disminución de la demanda no debe sorprender.
“En 2020 y principios de 2021, cuando aparecieron las primeras vacunas, todos estaban temerosos de morir por el virus”, observó Paul Offit, director del Centro de Educación de Vacunas del Hospital Infantil de Filadelfia, a la Voz de América.
“La mayoría se sienten más seguros, y tenemos a cientos de miles gritando en los estadios deportivos. La situación se siente más segura, así que tiene sentido que haya menos urgencia para vacunarse”, explicó. (La Voz de América)