Las entregas con drones ya son una realidad en Estados Unidos. Los envíos aéreos de pizzas y regalos de cumpleaños aún no son tan habituales como predijeron líderes tecnológicos, pero el servicio está disponible en algunas partes del país y las normas para ese servicio se están poniendo al día.
Los escépticos se preguntan si las entregas con drones pueden llegar a funcionar a gran escala, pero sus defensores sostienen que son más seguras, rápidas y mejores para el planeta que los enormes camiones de reparto que emiten gases de efecto invernadero.
Un puñado de empresas ya opera con drones, o lo harán hacia finales de año, en partes de Texas, Carolina del Norte o California, con proveedores como la startup israelí Flytrex, Wing y Amazon.
Comida, medicinas y objetos como cepillos dentales, son el tipo de productos pequeños y livianos que bien pueden ser enviados vía dron. En algunas zonas de África ya han sido usados desde hace años para entregar productos esenciales como insumos médicos.
Los envíos por dron de sustancias perecederas como sangre son algo lógico en lugares donde hay problemas de infraestructura y la mejor opción es el transporte aéreo. No obstante, hay expertos que son escépticos sobre que el sistema funcione en todos lados.
Por ejemplo, un dron puede llevar una carga desde una tienda a un lugar, pero su eficiencia es menor en comparación con un repartidor de paquetes a la antigua que puede ir a varios lugares.
«Se requeriría un pequeño ejército de drones para entregar los 150-200 paquetes que normalmente lleva un solo camión en una ruta», escribió el columnista Bloomberg Thomas Black.
Pero, el CEO de Flytrex, Yariv Bash, afirmó que los drones eléctricos, además de ser más eficientes y amigables con el ambiente, son más seguros. «Los drones no se cansan. No intentan enviar mensajes de texto mientras conducen. No beben y conducen. Obtienes un servicio mucho mejor», afirmó. (Diario Las Américas)