Durante las redadas, ICE detiene a “cualquier sospechoso” y si esa persona no porta una identificación que lo acredite como ciudadano estadounidense, es arrestada. Desde 2012 a la fecha, ICE ha liberado de su custodia unas 1,480 personas después de investigar sus reclamos de ciudadanía y donde las personas debieron demostrar que eran estadounidenses, deteniéndolas en ocasiones por meses o años en centros para inmigrantes. Este “daño colateral” de ICE por capturar inmigrantes en sus redadas, revela la falla de la agencia en la identificación de las personas para la deportación, incluidas las bases de datos incompletas y plagadas de errores. Algunos estadounidenses a pesar de demostrar su ciudadanía pasaportes y otros documentos, han tenido que acudir a cortes para liberar sus casos. Foto cortesía.
23 de noviembre de 2024
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